Cirujano argentino de renombre internacional, presidente de la Asociación Argentina de Cirugía, galardonado en 1989 con el título de Maestro de la Cirugía Torácica Argentina.
Nació en Bigand, al sur de la provincia de Santa Fe, el 5 de febrero de 1923. Ingresó a la Facultad de Medicina de Rosario en 1941, donde se graduó de Médico Cirujano en 1947 y de Doctor en Medicina en 1965.
En 1949, inicia su formación en cirugía torácica con el Prof. Mario Brea en el Hospital de Clínicas de la Facultad de Medicina de Buenos Aires, la cual completa en 1950 en los Estados Unidos, durante su estadía en diversos centros quirúrgicos.
En 1951 ingresa al Hospital Italiano, donde en 1953 es designado Jefe del Servicio de Cirugía Torácica y Cardiovascular. Allí organiza la Sección Cirugía Experimental formando un equipo de trabajo integrado por los Doctores Emilio Navarini, José Luis Ameriso, Mario Milano, Juan A. Della Bianca, Osvaldo Molina, Rubén Dellamea y la Dra. Magdalena Castagnino como anestesista, con quienes comienza a trabajar en cirugía cardíaca a cielo abierto.
Jefe del Servicio de Cirugía Torácica del Hospital Marcelino Freyre.
En 1971 es designado Profesor Titular de Clínica Quirúrgica de la Facultad de Medicina haciéndose cargo, además, de la Jefatura del Departamento de Cirugía de la Facultad.
Miembro Fundador de la Sociedad de Cardiología de Rosario, y de la Asociación de Cirugía del Litoral, habiendo sido Presidente de la Asociación Argentina de Cirugía y de la Sociedad Argentina de Cirugía Torácica y Cardiovascular.
Relator Oficial del 29º Congreso Nacional de Cirugía en 1958 y Presidente del 52º Congreso Argentino de Cirugía, fue galardonado en 1989 con el título de Maestro de la Cirugía Torácica Argentina.
Miembro Honorario de la Sociedad de Cirugía de Rosario y del Capítulo Argentino del American College of Surgeons, designado en 1993 Miembro Honorario Nacional de la Asociación Argentina de Cirugía.
Cirujano exquisito, con una técnica quirúrgica excepcional, brillaba por su capacidad docente e inquietudes de avanzada, siendo unos de los pioneros en la implementación de las residencias en el Hospital Centenario, sistema que tuvo como adalid a uno de sus maestros, el Dr. Mario Brea.
Su carácter afable y sencillo, unido a su actitud siempre proclive a apoyar las inquietudes que se le acercaban, hizo que quienes tuvieron la oportunidad de conocerlo, sintiesen por él un singular afecto.
Falleció en Rosario, el 3 de noviembre de 1993, a la edad de 70 años.
