Introducción a la charla por el Dr. Alberto J. MuniagurriaEn la Europa medieval llevo 12 generaciones para aceptar la idea que la mujer merecía respeto. En la época Victoriana 3 generaciones para aceptar que la mujer podía votar. El mundo moderno se ha tenido que adecuar a la igualdad sexual y legal en menos de una década. No cabe duda que los resultados tienen características caóticas y que la pena psicológica tiene que ser pagada.
Se empezó a hablar y escribir sobre temas de sexo con una franqueza no habitual y casi podría decirse que no se habla o escribe sobre otra cosa.
El hombre puede haber llegado a perder su templanza, asaltado por educadores sexuales, periodistas de medio de comunicación masiva, opinadores, feministas, sexólogos, fisiólogos, farmacólogos, que lo exponen y obligan.
Aunque la mayoría acuerda que lo sexual no es todo, actúa como si lo fuera.
Esta noche tenemos el lujo de escuchar a una figura de las letras nacionales, hija de nuestra ciudad, con fuerte raigambre en nuestra casa que nos exponga su visión de el genero y la literatura, en el marco del Ciclo sobre “Genero, Sexo Eros y otros asuntos”
Angelica Gorodischer que con su economía de palabras y riqueza de ideas, decía hace pocos días al periodista que la entrevistaba por su obra “Querido amigo”…
“Durante toda la historia de la literatura los varones han escrito sobre el erotismo de las mujeres, ahora me toca a mi asumir la voz y la mirada de un varón para hablar del erotismo propio del hombre y del de las mujeres que lo rodean”……
En fines del siglo pasado
Capote ponía este dialogo en una pareja que viajaba rumbo a Europa en la novela recientemente rescatada del olvido “Crucero de verano” “
Que diferencia hay entre el hombre y la mujer -gruñó el marido-Desde hace un tiempo, no hay diferencia entre las mujeres y los hombres.”
A lo que responde su mujer-“Tu mismo lo dices”