El Maestro Fernando Ciraolo presenta su conferencia en el Círculo Médico de Rosario
por Maestro Fernando CiraoloClasificación de las Artes:
- Visuales
* Pintura (Estática)
* Escultura (Estática)
* Arquitectura (Estática)
- Auditivas
* Música (Movimiento)
* Poesía hablada (Movimiento)
- Dependen de los dos primeros factores de su realización
* Teatro (Movimiento)
* Ópera (Movimiento)
* Ballet (Movimiento)
- Son creadas de una vez y para siempre
* Pintura (Estática)
* Escultura (Estática)
* Arquitectura (Estática)
* Cine (Movimiento)
- Necesitan recreación cada vez que son sometidas a la experiencia
* Obra teatral (Movimiento)
* Danza (Movimiento)
* Pieza musical (Movimiento)
Hay corrientes culturales que tienen a considerar a la música como un factor importante para la formación de la personalidad humana, no sólo porque crea un clima propio para despertar todas las facultades creadoras, sino porque le puede dar vida a la mayor parte de estas y favorecer su desarrollo.
Siendo la música uno de los factores expresivos y comunicantes de mayor significación del hombre, es indudable que este la poseyó como medio para expresar (o exteriorizar) la intimidad de su sentimiento y la turbulencia de su instinto.En las diversas culturas se verá la íntima relación entre el ser y la música, la extraordinaria importancia de la música ejecutada en grupo ejerce sobre el esfuerzo musical individual, la gran ayuda que la música representa para la memoria y la gran ayuda que la semejanza de algunas funciones de la música en todas las sociedades.Una de las más importantes funciones de la música, es llevar al individuo a establecer una relación de total integración con el grupo, hacerlo sentir aceptado.A continuación citamos algunas consideraciones sobre el hombre y la relación con su música.
El niño después de recibir los estímulos sensoriales tempranos no se conformará sólo con los sonidos de la naturaleza, sus propias necesidades le exigen crear otros sonidos. A medida que evoluciona su sensibilidad estética se hace más compleja, luego estructura esos sonidos en pautas precisas y reconocibles, a esto lo llamamos música. En todos las razas y culturas la expresión y la experiencia musical son fundamentales para la salud del hombre debido a que una vida sana requiere de la interrelación.El empleo de la música con el propósito de lograr y conservar la salud, la felicidad y el confort del hombre es universal. Este es un componente filosófico del bienestar de la persona.El modelo cultural determina su propio medio de expresión. Cada grupo cultural desarrolla su propio medio de expresión y así como cada grupo étnico crea su propio lenguaje, también desarrolla su propia música y cada individuo dentro de su grupo aprende la música de su cultura. Existen individuos que requieren imperiosamente imágenes visuales, sonidos, formas, texturas y ritmos. Estas necesidades son especialmente evidentes en los niños y es fundamental satisfacerlas para que crezcan y se desarrollen normalmente. Los impulsos de ver, oír, tocar, gustar, son tan naturales e intensos como el deseo de comprender.El hombre con su cerebro de billones de células, no sólo debe organizar los estímulos que le llegan y lo informan acerca de su medio, sino también su sentido estético. Ninguna cultura y tribu se ha satisfecho jamás con los sonidos que le ha ofrecido la naturaleza; el hombre ha producido nuevos sonidos y los ha ubicado de manera ordenada en algún sistema u organización que de modo general y predominantemente es rítmico y a veces melódico y/o armónico.La música y la religión están relacionadas de modo integral, uno de los más claros usos de la música se da en la religión. Entre una y otra existe una coincidencia muy sorprendente. Ej.: Algunos de los propósitos de los oficios religiosos y funciones musicales son muy similares, tienen en común de poder unir a las personas.En casi todas las culturas la música y la religión se hallan unidas con el fin de construir una defensa contra el miedo y la soledad.La música es comunicación no verbal ya que permite al individuo comunicarse a través de otrosmedios como, los bailes, cantos, ritmos y otras actividades en grupo. Esto es fundamental para comprender la influencia que ejerce la música sobre la conducta. Uno de los aspectos típicos de los que sufren desordenes de la conducta o son deficientes es precisamente la ausencia de esta interacción y conductas sociales adecuadas. La música no existiría y no sería necesaria si fuese posible comunicarse mediante la palabra con la misma facilidad con que lo es mediante la música.Por ejemplo: ¿Cómo expresar con palabras un beso, una sonrisa, el gesto de una despedida o el sabor amargo de una pérdida? ¿Cómo diríamos con palabras los sentimientos que evocan el Himno Nacional, un vals de Strauss, etc.La música es casi siempre una expresión de buena voluntad, un llegar a otros, y así se la interpreta. La música, entonces, es una expresión poderosa de la interrelación de la humanidad y casi toda ella se vincula con las relaciones positivas que acercan los individuos, como el amor, la lealtad, el patriotismo, etc. Así como también relaciones negativas como sentimientos de pérdida, enojos, angustia, etc. Es evidente, entonces el arte de la música es una fuerza que constituye al desarrollo y sensibilización del alma humana.¿Es necesario sufrir para crear?. Crear- crecer por la creación no está nunca exento de dolor. La creación es un punto de crisis del sistema, donde se pasa a algo diferente, distinto a lo anterior, y esa creación nueva siempre "es parida con dolor"."Te preocuparás el sustento con el sudor de tu frente", algo sólo puede ser alcanzado por el trabajo, por el esfuerzo; hasta en la posición del jefe o del amo hay exigencia de trabajo.Quienes llegan a detentar el poder de los amos saben del supuesto trabajo que ese privilegio exige.Los privilegios son también una exigencia a sostener. Si una frente suda es porque hay trabajo, qué trabajo?. El de sostenerse en la existencia......Es evidente entonces que el arte en su conjunto no implica una creación innecesaria, sino una fuerza que contribuye al desarrollo y a la sensibilización del alma humana. El arte es el código que se comunica con el alma de las cosas que es para ella un pan cotidiano, imposible de obtener de otra manera.Si el arte no cumpliera esta obligación dejaría un hueco, pues no existe ningún poder que pueda tomar su lugar. Cuando el alma humana alcance una vida más intensa, el arte renacerá, pues el alma y el arte se encuentran en relación mutua de efecto y perfección.El artista debe tener qué decir, pues su deber no es dominar la forma sino amoldarla a un contenido. El artista no es un ser con privilegios o prerrogativas en la vida, no puede existir sin deberes, está sujeto a una labor ardua que a veces le pesa como una cruz.Si dirigimos una mirada, en particular a aquellos seres que han padecido un dolor casi en toda su existencia. Esas personas que se afirman en la desgracia para dar a la vida, aquello que la vida la privara, entonces le damos extraordinaria importancia y nos asombramos ante ese dominio del espíritu milagro de la voluntad. Así Braile en su ceguera llenó de luz los ojos de los ciegos; y así Beethoven en su sordera, construyó los más bellos encantos sonoros, para deleites de los oyentes del mundo. Dos voluntades que transformaron en el sumo amargo de su desgraciado vivir, en reconfortable bálsamo para sus semejantes.En el caso de Beethoven, alrededor de los 25 años, empieza con la sordera que se le presume como mal pasajero pero se acentúa poco a poco, no le impide componer; aún puede dirigir y tocar el piano en conciertos públicos y privados; dar lecciones se le es más difícil, la conversación es casi imposible. Con mucho sigilo a consultado varios médicos, y las curacionesprescriptas le martirizan el cuerpo y el alma con nuevo sufrimiento y desilusiones. Hasta que llega el día en que se le confirma su sordera.Beethoven, ajeno a cuanto le pasaba a su alrededor, seguía escuchando y tocando la música que fluía de su cerebro y no de sus oídos. Smetana, Robert Franz y otros, también sufrieron sordera en sus últimos años, lo que no fríe óbice para que continuaran escribiendo. Contrariamente a estos compositores, en quienes la enfermedad disminuyó el poder creador, en Beethoven la sordera fue necesidad a producir, pues la composición era su único medio de subsistencia. Más aún; ya que no podía tener luego una comprobación auditiva, ello lo obligó a "cerebralizar" su música con perfecto cuidado, logrando en sus obras una solidez constructiva y sonora nunca igualadas; pero por sobre todas las cosas, lo instó a volcar en sus notas toda su alma acongojada, "radiografiando" su estado anímico con un "patetismo" nunca oído en aquellos tiempos.